El proceso de fabricación por doble compresión radial es especialmente adecuado para el transporte de aguas residuales, residuales, pluviales, meteóricas, de riego y de regeneración y en los sistemas tecnológicos de centrales hidroeléctricas. Este tipo de tubería permite alcanzar altas presiones de funcionamiento, considerables profundidades de instalación, adaptación elástica en el
suelo, estabilidad bajo la presión del agua subterránea e índice de rugosidad limitado. El sistema de doble compresión radial, distribuyendo el hormigón en varias capas, a lo largo de toda la pared interna del tubo, favorece una serie de compactaciones previas y garantiza un prerrevestimiento perfectamente regular, con total ausencia de deformaciones durante el proceso de fraguado.
El alto nivel tecnológico de este proceso de fabricación, asociado a una producción controlada de calidad del hormigón, otorga al productor y al usuario la más absoluta garantía sobre la calidad del producto, pudiendo:
- Mejorar y controlar automáticamente la compacidad del hormigón, asegurando una producción constante de los tubos fabricados.
- Utilizar un hormigón que evite la formación de grietas de asentamiento y espacios de paso en las tuberías, obteniendo así un producto perfectamente impermeable, duradero y con un acabado interior y exterior liso.
- Obtener la perfecta conformidad del producto fabricado de acuerdo con la norma UNI EN 1916, con tolerancias dimensionales ampliamente conformes.
- Se utilizan diferentes tipos de revestimiento y cemento.
Para la resistencia a la flexión longitudinal el producto es dimensionalmente adecuado.